Puede que los drones se popularizaran inicialmente como fuente de entretenimiento para aficionados, pero se han convertido rápidamente en una herramienta de trabajo indispensable para una amplia gama de industrias.
Sectores como la construcción y la inspección de edificios han adoptado esta nueva tecnología por su capacidad para proporcionar información de inspección crítica en una fracción del tiempo, a un coste inferior al de los métodos topográficos tradicionales y añadiendo una clara ventaja en materia de seguridad.
Las inspecciones con drones se realizan fácilmente en lugares de difícil acceso y proporcionan resultados superiores a los de los métodos de inspección tradicionales.
La lista de usos de la inspección y cartografía mediante drones parece interminable.
Tanto si inspeccionan un edificio nuevo como si investigan una reclamación al seguro, las empresas necesitan recopilar datos precisos con rapidez. La cartografía con drones proporciona esta capacidad, permitiendo a los inspectores capturar de forma segura y sencilla una evaluación aérea de alta resolución de un lugar en cuestión de minutos.
La información recopilada puede analizarse literalmente desde cualquier lugar del mundo, lo que ayuda a las personas a colaborar y tomar decisiones más informadas en muy poco tiempo.
Tabla de Contenidos
Procesos cartográficos de gran resolución
Para grandes áreas, los procesos cartográficos utilizados por los drones son muy similares a los métodos aéreos tradicionales. La topografía con drones, por ejemplo, utiliza una técnica llamada fotogrametría.
Este proceso de realizar mediciones a partir de fotografías se sigue utilizando hoy en día: muchos de los mapas que utilizamos se crearon utilizando imágenes fotogramétricas tomadas desde aviones tradicionales. Los drones han mejorado esta técnica en muchos aspectos.
Un dron puede desplegarse rápidamente en casi cualquier lugar, incluso en zonas demasiado peligrosas para los aviones tradicionales. El coste de adquirir y utilizar un dron es minúsculo en comparación con el de adquirir y utilizar aviones y helicópteros.
Con el software adecuado y el buen hacer de un piloto profesional de drones se puede controlar con precisión su trayectoria de vuelo, velocidad y frecuencia de imagen de la cámara para ahorrar tiempo y mejorar la eficacia. Este tipo de precisión convierte a los drones en la plataforma perfecta para la inspección y la cartografía.
La combinación de las actuales cámaras de alta resolución y las enormes posibilidades de vuelo del drone permite cartografiar con niveles de detalle nunca antes imaginados.
Mayor calidad de imágenes
Los drones son capaces de obtener imágenes de mayor calidad tomadas desde altitudes más bajas, lo que significa que producen mapas de calidad superior y representaciones en 3D del lugar o la estructura que se está inspeccionando.
Una vez recopilados los datos del lugar, las tecnologías más avanzadas de procesamiento de imágenes pueden crear múltiples perspectivas de la zona de estudio y convertir las imágenes en modelos y mapas en 3D.
La cartografía con drones ofrece un enorme potencial a muchos sectores, como la construcción, la agricultura, la minería, la inspección de infraestructuras y el sector inmobiliario.
Tener la capacidad de crear una fotografía clara y precisa o un modelo 3D de la zona de su proyecto, completo con mediciones, proporciona una ventaja de ahorro de costes que mejora la precisión y la seguridad al mismo tiempo.
Inspecciones con drones
Industrias como las del petróleo y el gas, la construcción, las comunicaciones y los servicios públicos están obligadas a realizar inspecciones rutinarias de sus equipos e infraestructuras para garantizar unas condiciones de trabajo seguras.
Las inspecciones periódicas realizadas a mano sólo pueden lograr un número limitado de resultados además de someter a los trabajadores a situaciones peligrosas e interferir en las operaciones.
Por ello, cada vez más empresas recurren a los drones para hacer frente a los numerosos retos operativos a los que se enfrentan a diario los inspectores humanos.
Muchas tareas, como la identificación de la corrosión, la detección y el análisis de grietas finas, la detección de derrames y fugas, y los estudios del terreno, se realizan de forma mucho más segura y eficiente con drones que con humanos.
Gracias a una amplia selección de cámaras y datos de sensores, que pueden recogerse desde el dron y enviarse a un ordenador en tiempo real para su evaluación, los problemas pueden resolverse rápida y eficazmente con una interrupción mínima de las operaciones.
Drones e infraestructuras
Las infraestructuras son un ejemplo fantástico de un campo en el que los drones están marcando una gran diferencia en lo que respecta a la inspección y la cartografía.
Las infraestructuras públicas son un componente esencial de la sociedad actual e incluyen una amplia red de estructuras, como carreteras, vías navegables, redes eléctricas, puentes, ferrocarriles y aeropuertos.
El mantenimiento constante de estas estructuras es esencial para el transporte fluido e ininterrumpido de bienes y servicios, operaciones necesarias para que prospere una economía moderna sana.
El mantenimiento constante de esta red de alta tecnología es extremadamente costoso y se está deteriorando, ya que muchas de las principales estructuras de muchos países tienen más de 50 años.
Los drones se están convirtiendo en la alternativa más eficaz a las inspecciones físicas cuando se trata de mantener este conjunto de estructuras envejecidas que son tan fundamentales para nuestro modo de vida.
Dado que los drones se equipan con diversas cámaras y sensores, pueden operar de día y de noche, además de detectar problemas y daños invisibles a simple vista.
Los drones pueden manejar el tamaño y el alcance de una vasta red de infraestructuras realizando tareas tediosas y repetitivas mediante rutas de inspección autónomas preprogramadas.
Son capaces de inspeccionar vastas zonas de forma única y más eficaz que sus homólogos humanos.
Además, pueden completar las inspecciones y la cartografía de estos sistemas en menos tiempo y a menor coste, lo que permite inspecciones más frecuentes, una resolución de problemas más rápida y una reducción de las interrupciones del sistema global.
Conclusiones
Los drones tienen un papel importante que desempeñar en el futuro de la inspección y la cartografía: sus capacidades específicas se prestan perfectamente al sector.
Su capacidad para reducir costes al tiempo que aumentan la seguridad permite utilizarlos en casi todas las aplicaciones de inspección y cartografía imaginables.
